Hay un lugar en Panamá, a dos horas y media de la ciudad, es uno de los lugares más hermosos de todo el mundo. San Blas, un archipiélago compuesto por 365 islas, una para cada día del año, ubicado en el Caribe panameño. Treinta y seis de esas islas están habitadas por el pueblo Guna, los indígenas que mantienen este lugar preservado.
El archipiélago de las Islas San Blas, pertenece la comarca de Guna Yala o Kuna Yala, es una de las cinco comarcas indígenas de Panamá, situadas frente a la costa norte del Istmo. Limita al sur con las provincias de Emberá y Darién, y al este con Colombia. Toda la comarca tiene una extensión aproximada de 2.300km², sobre una franja de tierra de 373 km, además de las 365 islas que son objeto de nuestro post y que rodean la costa. Las islas reciben el nombre de Cayos.
San Blas es caribe puro. Más de 300 islas pequeñas, arena blanca y suave, aguas turquesas, arrecifes coralinos, palmeras, miles de peces la rodean, también la isla son refugio de las estrellas más lindas de mar. Todo esto, alejado de ruido y de la civilización. La comarca, con sus aciertos y sus terribles falencias, limitó bastante el ingreso de terceros y las inversiones turísticas. El Congreso de la comunidad indígena Guna es quien tiene autoridad totalitaria en este territorio.